Los siguientes extractos de la introducción del movimiento Chicano: perspectivas del siglo XXI, editado por Mario T. García, proporcionan un contexto histórico sobre el movimiento Chicano.
El movimiento Chicano fue el movimiento de Derechos Civiles y empoderamiento más grande y extendido por personas de ascendencia mexicana en los Estados Unidos. Los años clave del movimiento son entre 1965 y 1975 . . . ¿Por qué empezar en 1965?, Ese año marcó el comienzo de la famosa huelga de la uva en el Valle Central de California (Valle de San Joaquín) dirigida por César Chávez, Dolores Huerta, y los trabajadores agrícolas para establecer un sindicato para los trabajadores agrícolas que no solo les traería salarios muy merecidos y aumentos de beneficios, sino un sentido de dignidad para su trabajo y para sí mismos., 1
el movimiento Chicano se caracterizó en un nivel por la continuación de un movimiento de derechos civiles más largo, liderado inicialmente por lo que yo llamo la generación Mexcian-Americana de la década de 1930 a través de la década de 1950 que inició el primer movimiento importante de Derechos Civiles de los mexicoamericanos en los Estados Unidos. 2
llamó a la comunidad Chicana a ser capaz de controlar sus propios recursos y determinar su propio futuro. Pidió el control comunitario de sus escuelas, su economía, su política y su cultura., 3
la generación Chicana entendió que como parte de su auto—empoderamiento, tenía que tener un sentido de su historia-una historia que se le había negado en las escuelas. Se suponía que los mexicanos no tenían una historia en los Estados Unidos, sin embargo, la generación Chicana instintivamente reconoció que tenía una historia o contra-historia que necesitaba descubrir. Esto significó explorar su pasado indígena y mestizo (indio y español, e incluso Africano y asiático): sus raíces en la historia mexicana, incluida la guerra de México con Estados Unidos; la Revolución Mexicana de 1910; y la historia de los inmigrantes mexicanos a Estados Unidos., Pero esta era una historia que solo conocía a través de la tradición familiar y comunitaria y no estudiada sistemáticamente por los historiadores. Esta búsqueda de un pasado relevante y utilizable llevó al desarrollo del campo de la historia Chicana como parte de los esfuerzos del movimiento para establecer programas de estudios chicanos en universidades y colegios. 4